02. ¿Puede el análisis multicriterio ayudarnos a definir una “estrategia de vida”?

Una de las aplicaciones del análisis multicriterio que más me ha impactado es la que presenta Ralph Keeney (1992) en su libro “Value-Focused Thinking: A path to Creative Decisionmaking“. En este libro, en el capítulo 13, Keeney habla acerca de un proceso que le llevó a definir sus objetivos de vida estratégicos, y de allí a identificar un conjunto de criterios de evaluación para decidir nada menos que hasta qué punto se embarcaba en determinadas actividades profesionales.

Keeney define como objetivo estratégico principal “la maximización de su calidad de vida”. Yo creo, sin temor a equivocarme, que este objetivo es compartido por casi todas las personas. A partir de allí identifica cuatro factores que definen para él el concepto de “calidad de vida”: (1) disfrutar de la vida (“enjoyment of life”); (2) estar satisfecho intelectualmente (“be intellectually fulfilled”); (3) contribuir a mejorar la vida de familiares y amigos (“enhance the lives of family and friends); y (4) contribuir a la sociedad (“contribute to society”). Desde un punto de vista particular, yo añadiría quizás algún aspecto relacionado con el equilibrio entre los diferentes niveles del ser: lo físico, lo mental, lo espiritual… , pero en fin, cada uno de nosotros puede proponer un esquema de este tipo, según el sistema de valores propio.

A partir de allí, Keeney identifica cuidadosamente un puñado de elementos causales e interrelacionados que, si se los toma en cuenta, llevarían a lograr una calidad de vida altamente satisfactoria. El razonamiento es el siguiente: mejoraré mi calidad de vida si persigo relaciones humanas y actividades que valgan la pena. A su vez, podré lograr relaciones y actividades que valgan la pena si maximizo las oportunidades que tengo para elegir; y si maximizo también la libertad que tengo de elegir. ¿Cómo minimizo mis restricciones en cuanto a la libertad de elegir? Bueno, pues maximizando mi salud, mi bienestar financiero y mi tiempo libre. ¿Cómo minimizo las restricciones en cuanto a mis oportunidades para elegir? Seguramente potenciando el pensamiento creativo y minimizando toda restricción debida a terceros, es decir, mejorando mi aspecto, mi simpatía, mis capacidades profesionales, etc.

[Nota: se puede abrir la figura en otra ventana para verla con mayor detalle...]

A partir de esta reflexión, que puede ser plasmada en forma de un modelo causal (ver figura), Keeney identifica un conjunto de criterios de evaluación, es decir, un modelo multicriterio, que le permitiría “valorar” la contribución de sus actividades profesionales a su calidad de vida, según su propia y muy particular definición de calidad de vida. El esquema multicriterio es el siguiente:


A partir de este punto, las técnicas del análisis multicriterio permiten construir escalas de evaluación para cada criterio y subcriterio, y correspondientemente unas funciones de valor que darían el componente numérico al modelo. Es así como Ralph Keeney evalúa cada opción profesional que se le presenta, y acepta sólo aquellas opciones que superan un determinado valor límite. Cuando la actividad escasea, puede bajar este valor y viceversa. Este método, sin ser una panacea universal, permite controlar un aspecto crítico de la vida, induciéndonos a reflexionar sobre nuestros factores clave de éxito y de satisfacción personal. Es pensamiento creativo, reflexivo y racional. Una joya.

Saludos!

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